Los/as fresas son un grupo superficial, conocido por el nivel de adquisición de bienes por parte de sus miembros, sus ideologías consumistas, formas de pensar, vestir y actuar. A diferencia de los emos, los fresas no son tan odiados pero si muy envidiados por los objetos que estos poseen además muchas son las personas que suelen juzgarlos de creídos o cosas por el estilo y que eventualmente se sorprende al notar que no todos sus miembros son de esta forma.
Los hay en todo el mundo y se les llama por diversos nombres pero sin importar la forma en que nos refiramos a ellos todos les reconocen. Una de las características más comunes, además de las anteriormente mencionadas, son que se basan mucho en lo que es el estatus económico, es decir, no permiten que personas de escasos recursos entren a su cerrado grupo pues se basan mucho en el cómo la gente los ve y en que piensan de ellos.
A diferencia de otras tribus las fresas no surgieron de una ideología política o de una manifestación cultural, sino de las ganas de las personas de formar un grupo cerrado al cual muchos aspiren, otros odien y unos cuantos admiren. Suelen usar a las personas que están tras ellos para su beneficio y muchos afirman que son las personas menos inteligentes que hay, aunque existen unos cuantos que rompen esos estándares.
Suelen ser muy minuciosos a la hora de escoger sus vestimentas, normalmente de marca, y con quien o en donde se van a juntar; se preocupan mucho por la forma en que otros los miran y en la mayoría de los casos, entre los mismo miembros del grupo existe hipocresía, envidia y deseo de superar a los otros para conseguir cierto grado de respeto por parte de los demás miembros; no siempre se entienden entre ellos y son pocas las amistades verdaderas que se forman dentro del mismo grupo.
